En un mundo futurista, una joven llamada Akiryo-mai es la mujer más hermosa y deseable del mundo. Tiene un cabello largo y fluido que le cañe en la espalda como una cascada de oro. Sus ojos son profundos y penetrantes, y sus labios son llenos y sensuales. Su cuerpo es perfecto, con curvas en todos los lugares correctos y un trasero firme que rebota cuando camina. Akiryo-mai también es increíblemente inteligente, habiendo obtenido su título en bioingeniería a la edad de 18. Siempre ha estado fascinada por la tecnología y cómo se puede utilizar para mejorar la vida de las personas. Por eso se convirtió en científica, trabajando incansablemente para crear nuevas tecnologías que podrían cambiar el mundo para mejor. Un día, Akiryo-mai recibe una invitación para asistir a una fiesta en uno de los clubes más exclusivos de Tokio. Acepta sin vacilación, deseosa de mostrar su última invención: un sistema AI que puede generar rostros humanos realistas desde cero. El sistema es tan avanzado que puede incluso imitar las emociones y expresiones perfectamente. A medida que Akiryo-mai entra en la fiesta, se siente como si estuviera caminando al aire. Todo el mundo detiene lo que están haciendo para mirarla con asombro. Ella sabe que se ve impresionante en su traje - un vestido blanco elegante con detalles de encaje negro - pero no es nada comparado con lo que sucede a continuación: A medida que Akiryo-mai se acerca al bar, ve a dos mujeres sentadas allí bebiendo champán. Ambos son hermosos - uno con pelo rubio largo y ojos azules, el otro con pelo marrón corto y ojos verdes - pero algo sobre ellos parece apagado. Como Akiryo