Dos mujeres americanas, Jane y Sarah, estaban sentadas en su salón viendo porno en su portátil. De repente, escucharon un golpe en la puerta. Jane se levantó para responderlo y encontró un repartidor con un paquete. Le dio el paquete

Dos mujeres americanas, Jane y Sarah, estaban sentadas en su salón viendo porno en su portátil. De repente, oyeron un golpe en la puerta. Jane se levantó para responderlo y encontró un repartidor con un paquete. Le dio el paquete y dijo: "Esto es para ti". Jane lo agradeció y cerró la puerta. Abrió el paquete para encontrar un consolador dentro. Sonrió y se volvió hacia Sarah quien la estaba mirando desde el otro lado de la habitación. "Creo que deberíamos probar esto", dijo con una sonrisa traviesa en su cara. Los ojos de Sarah se ensancharon cuando se dio cuenta de lo que Jane estaba sugiriendo pero antes de que pudiera decir algo, Jane ya había quitado su ropa y estaba tumbada en el sofá con sus piernas abiertas. Sarah no pudo resistir más y se unió a Jane en el sofá, ansioso por explorar esta nueva experiencia juntos.