La joven en la imagen era hermosa, con alto detalle y pelo suave. Estaba mirando la cámara con una expresión asustada, como si supiera que algo malo iba a suceder. Su piel suave y su enfoque claro la hicieron parecer un verdadero

La joven en la imagen era hermosa, con alto detalle y pelo suave. Estaba mirando la cámara con una expresión asustada, como si supiera que algo malo iba a suceder. Su piel suave y su enfoque claro la hicieron parecer una persona real. La imagen era increíblemente realista, haciendo difícil creer que no era real. Parecía una foto analógica antigua que había sido tomada con una cámara de alta calidad de los años 50 o 60. Los detalles eran tan realistas que se sentía como si pudieras alcanzar y tocar su pelo o el pecho en forma de taza. Fue una experiencia surrealista, pero la que te dejó sintiéndote fascinada y perturbada al mismo tiempo.