La joven adulta era un maestro de su artesanía, creando hermosas y eróticas imágenes con sus manos talentosas. Tenía una belleza natural que era difícil de ignorar, con el pelo largo que la cavó en la espalda en ondas suaves. Su cuerpo era delgado y tonificado, con curvas perfectas en todos los lugares adecuados. Su piel era suave y sin mancha, dando un aire de inocencia a pesar de su profesión. Mientras trabajaba en la foto, no podía evitar sentir un sentido de orgullo por lo que había creado. Ella sabía que esta sería una de las mejores imágenes que había tomado, y que se mostraría orgullosamente en las paredes de muchas casas alrededor del mundo. Pero mientras se miraba a sí misma en el espejo, algo parecía de su reflejo. No fue hasta que lo vio desde otro ángulo que se dio cuenta de lo que era - un tatuaje grande en su muslo izquierdo! Era un símbolo desmayado que parecía un signo de infinito invertido con dos líneas afiladas saliendo de cualquier lado. Ella sintió un timbre corriendo por su columna mientras se dio cuenta de lo que esto significaba - alguien había visto a través de su disfraz y descubrió quién era realmente! Pero antes de que el pánico pudiera establecerse, algo más cogió su ojo - había otros símbolos esparcidos a través de la imagen, escondidos entre toda la carne y curvas desnudas. Eran símbolos de poder y fuerza, aquellos que hacían temblar a la gente a su misma vista! La joven adulta sabía entonces que esta imagen sería una para recordar por años venideros - no sólo porque era hermosa sino también porque tenía mucho más que una fotografía ordinaria podría esperar capturar.