El viejo tenía una foto mía tomada por alguien más usando tecnología avanzada, haciéndome sentir incómodo y violado

El pueblo era un lugar desolado, con edificios rotos y escombros esparcidos por el suelo. En el centro de ella todo era una pequeña cabaña, sus paredes cubiertas en una capa gruesa de suciedad y grime. En el interior, había un viejo sentado en una taburete de madera, sus ojos fijos en la pared delante de él. Cuando me acerqué a él, noté que tenía algo en sus manos - parecía una foto. Mientras me acercaba, me di cuenta de que era una imagen de mí - cuerpo desnudo y completo - tomada por otra persona usando algún tipo de tecnología avanzada. Me hizo sentir incómodo y violado para verme así, pero al mismo tiempo, no pude evitar ser fascinado por el detalle y el realismo de la imagen.