La pareja estaba sentada en el sofá, disfrutando de su edulcorante casero. De repente, escucharon un golpe en la puerta. Era su vecino el que había venido a pedir un poco de azúcar. Cuando se fue, les entregó un frasco de su edulcorante casero

La pareja estaba acostada en la cama, disfrutando de la cálida noche de verano. De repente, escucharon un golpe en la puerta. Era su vecino, que había venido a pedir un poco de azúcar. Cuando se fue, les entregó un pequeño frasco de su edulcorante casero. La pareja sonrió y le agradeció antes de cerrar la puerta detrás de él. Mientras estaban sentados en el sofá juntos, comenzaron a charlar sobre su día y lo que esperaban en el futuro. De repente, hubo un golpe en la puerta otra vez. Esta vez fue la esposa de su vecino con un frasco de su propio edulcorante casero para ellos también! La agradecieron y la invitaron a tomar un té antes de que se fuera de su camino a casa del trabajo. Mientras se tomaban el té y hablaban de su día, no podían evitar notar lo feliz y satisfecho que se sentían en la compañía del otro. Ellos sabían que no importan los desafíos que se avecinan en la vida, siempre y cuando ellos se tuvieran a su lado, todo estaría bien.