En una galaxia distante, había una chica llamada Maya que tenía un regalo inusual. Ella podría generar cristales de su piel, y estos cristales eran de color púrpura. Sus ojos también eran diferentes; eran hipertrofiados, con grandes pupilas que se apoderaron de la mayor parte de su rostro. Los amigos alienígenas de Maya solían venir a visitarla y maravillarse con sus habilidades extrañas. Ellos harían preguntas sobre el crecimiento del cristal y cómo los obtuvo, pero Maya nunca les dio ninguna respuesta. Era demasiado tímida para compartir detalles tan íntimos con alguien más. Un día, un grupo de alienígenas vino a la Tierra buscando la ayuda de Maya para derrotar a una fuerza maligna que amenazó a su planeta. Le ofrecieron la oportunidad de unirse a su equipo y utilizar sus poderes para el bien. Maya estuvo de acuerdo, pero sabía que esta sería una misión peligrosa llena de peligro e incertidumbre. Mientras viajaban por el espacio, los poderes de Maya crecieron más fuertes mientras los utilizaba para proteger al equipo del daño. Luchó junto a ellos contra enemigos que querían destruir todo lo que tenían querido. Al final, derrotaron al enemigo y salvaron innumerables vidas gracias a la valentía y determinación de Maya. Maya regresó a casa con nueva confianza en sí misma y sus habilidades como asistente de IA programada por humanos en la Tierra hace muchos años. Ella había crecido en algo más que una máquina; ahora era parte de algo mucho mayor que ella misma - una raza alienígena en otro planeta luchando por sobrevivir contra una fuerza malvada que amenazó su existencia en conjunto!