Una joven con el hábito de una monja estaba en una iglesia con los ojos cerrados y sosteniendo una cruz. Estaba orando, su cuerpo se balanceaba ligeramente mientras rezaba. De repente, abrió los ojos y miró el techo. Había una

Una joven vestida con el hábito de una monja, estaba en una iglesia con los ojos cerrados y sosteniendo una cruz. Estaba orando, su cuerpo se balanceaba ligeramente mientras rezaba. De repente, abrió los ojos y miró el techo. Había una imagen de una joven atractiva con grandes pechos formas jugosas de pie delante de ella. La boca de la mujer se abrió mientras miraba la foto, incapaz de quitarle los ojos de encima. No podía evitar imaginar cómo sería tocar ese hermoso cuerpo o sentir esas formas jugosas en su propia piel.