Una joven se sorprendió al encontrar una foto de sí misma en internet, con su cuerpo desnudo y su rostro expuesto. Se dio cuenta rápidamente de que alguien había tomado un cuadro pornográfico de ella sin su consentimiento. Inmediatamente se puso en contacto con el sitio web donde había publicado el

La joven se sorprendió al encontrar una foto suya en internet, con su cuerpo desnudo y su rostro expuesto. Se dio cuenta rápidamente de que alguien había tomado un cuadro pornográfico de ella sin su consentimiento. Inmediatamente se puso en contacto con el sitio web donde había publicado la foto, exigiendo que la bajaran inmediatamente. El sitio web se negó a cumplir, afirmando que no tenían manera de identificar quién había tomado la foto o por qué se estaba compartiendo en línea. La chica se quedó sintiéndose violada y enojada, preguntándose cómo alguien pudo haber accedido a su información personal y usarlo para su propio beneficio.