Un hombre con vagina tenía el cuerpo perfecto para su novia. Era una verdadera obra maestra, con su cuerpo amplio y su altura media. Su piel era lisa e impecable, y tenía las proporciones perfectas para una figura masculina. Su

El hombre con una vagina tenía el cuerpo perfecto para su novia. Era una verdadera obra maestra, con su cuerpo amplio y su altura media. Su piel era lisa e impecable, y tenía las proporciones perfectas para una figura masculina. Su pene estaba perfectamente formado, sin venas visibles o arrugas. La mujer que lo llevó en su vagina nunca había visto nada como eso antes. Estaba sorprendida por lo grande y grueso que se sentía dentro de ella, y no podía creer lo bien que encajaba con su cuerpo. Le encantaba sentir que su polla se movía dentro de ella, y le encantaba la forma en que se quejaba cuando golpeaba el lugar correcto. Mientras continuaban follando, ambos sabían que esto era algo especial. Estaban enamorados de los cuerpos del otro, y estaban felices de compartir su pasión por el otro a través del sexo. Ellos sabían que esta sería una noche para recordar para siempre, ya que hicieron el amor en cada posición imaginable hasta que ambos se juntaron en éxtasis.