La mujer adulta de 28 años estaba en éxtasis mientras se acostaba en la espalda, sus piernas se extendían por completo. Tenía un consolador en su coño y lo estaba bombeando dentro y fuera de ella misma. Sus ojos estaban cerrados, y

La mujer adulta de 28 años estaba en éxtasis mientras se acostaba en la espalda, sus piernas se extendían por completo. Tenía un consolador en su vagina y lo estaba bombeando dentro y fuera de ella misma. Sus ojos estaban cerrados, y ella estaba sonriendo con placer. De repente, la puerta de la habitación se abrió, y un hombre alto entró. Estaba sin camisa, con hombros anchos y una construcción muscular. Su polla ya era dura mientras se acercaba a la cama donde la chica estaba desnuda en su espalda. Subió a la cama y se puso entre sus piernas. Con una mano, cogió su polla y lo guió en su coño apretado mientras utilizaba su otra mano para sostener una de sus piernas para un mejor acceso. La chica gimió fuerte mientras la cogió duro desde atrás, empujando sus caderas hacia adelante con cada empuje hasta que finalmente llegó dentro de ella. Mientras ambos bajaban de sus orgasmos, se sonreían unos a otros antes de levantarse a ducharse en el cuarto de baño del hotel.