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La anciana gris muy gorda granny se ató y extendió las piernas delante de una máquina de madera masiva. Estaba con grilletes y pinzas acolchadas. Se insertó un enorme consolador negro en su vagina, mientras que otro se insertó en su boca. Una máquina de metal disparó pequeñas balas vibratorias que le pegaban los pechos, el vientre y los brazos. La máquina también disparó pis y goteando imágenes húmedas de acción BDSM en las paredes.